viernes, 26 de noviembre de 2010

Miguel Primo de Rivera y su "dictablanda"

Por todos es sabido que la verdad es subjetiva y por eso no creo que exista ninguna “verdad absoluta”. Por poner un ejemplo: en la guerra jamás un ciudadano dirá que su nación es la cara oscura del conflicto. Sin embargo asegurarán con certeza que la que engaña, mata y roba es la contrincante. Algo así le ocurre a mi personaje de esta semana. Estoy seguro que de preguntar a nuestros abuelos y bisabuelos acerca de la figura de Miguel Primo de Rivera, nos responderían que fue un bendito y un santo. Eso sólo si ellos nacieron por los alrededores de nuestra ciudad, Jerez de la Frontera. Si, por el contrario, preguntásemos a las personas de edad nacidas en el resto de la península siempre nos dirán que fue un dictador y como tal no creo que tenga una buena noción de él, por tanto ¿a quién hacemos caso? Juzguen ustedes mismos.

Miguel Primo de Rivera (8 de enero de 1870) pertenecía a una familia jerezana de gran tradición militar. A la edad de catorce años ingresó en la Academia Militar y, tras completar la instrucción, fue destinado a Melilla, destino en el que logró una serie de rápidos ascensos. En 1908, fue ascendido a coronel y poco después quedó viudo. En 1915 volvió a la península, como gobernador militar de Cádiz.

Más adelante fue capitán general de Valencia, de Madrid y de Barcelona. Estos destinos le pusieron en contacto con los agudos problemas sociales y políticos de la época. En Barcelona, Primo de Rivera se ganó el apoyo de los sectores más conservadores de la Lliga, gracias a su política de mano dura contra la delincuencia y la conflictividad social.

Como reacción al Desastre de Annual, Primo de Rivera, de ideales militaristas, nacionalistas y autoritarios, dio un golpe de Estado (13 de septiembre de 1923) con el apoyo de diversos sectores de la sociedad española, suspendiendo la constitución de 1876, prohibiendo la libertad de prensa, disolviendo el Gobierno y el Parlamento e implantando un régimen dictatorial dirigido por un Directorio Militar, con el visto bueno del rey Alfonso XIII, la Iglesia católica, el ejército y de las fuerzas conservadoras en general.

En un principio la oposición a la dictadura fue mínima. En los primeros años de la dictadura, persiguió a los anarquistas y a los comunistas, suprimió la Mancomunidad de Cataluña persiguiendo a los catalanistas, eliminó los partidos políticos, creó un partido único, la Unión Patriótica (1924), reforzó el proteccionismo estatal en favor de la industria nacional, fomentó la construcción de grandes obras públicas y prohibió el uso de las lenguas regionales en los actos públicos.

El Directorio Militar dio paso a un Directorio Civil (1925-30) y se nombró una Asamblea Nacional (1927) que elaboró un anteproyecto de Constitución (1929). La crisis económica derivada del crack de 1929 afectó muy negativamente a España haciendo que el cambio de la peseta en relación a la libra esterlina casi se triplicara y que la mejora económica derivada de los "felices años veinte" se esfumara.

Divididas las huestes seguidoras y enrarecidas las relaciones del dictador con el rey, no fue posible afrontar el auge de la oposición. Socialistas, republicanos e intelectuales se unieron en la campaña contra la dictadura, así como estudiantes y obreros. Finalmente, desautorizado por el rey y los altos mandos militares, Primo de Rivera presentó su dimisión el 28 de enero en 1930 y se exilió en París donde moriría el 16 de marzo de 1930 a causa de una diabetes.

lunes, 22 de noviembre de 2010

Hidalgo Álvar Núñez

“A Álvar Núñez Cabeza de Vaca. Homenaje de la Administración General de Parques Nacionales y Turismo, a la memoria del descubridor de estas Cataratas. Don Álvar Núñez Cabeza de Vaca, quien tras cruentas luchas con la naturaleza y lo ignoto, en su temerario viaje desde las selvas brasileñas atlánticas, en busca de una vía al Río de la Plata, descubrió esta maravilla del mundo en el año 1541.” Así dice el rótulo de la placa conmemorativa que se encuentra al pie de las cataratas del Iguazú, descubiertas por este célebre conquistador. Nació en Jerez de la Frontera, en el año 1492, en el seno de una familia puramente hidalga. Huérfano de padre y madre y nieto de uno de los conquistadores de la isla de Gran Canaria, pronto descubrió que la sangre que corría por sus venas, además de ser puramente de su tierra, era tan intrépida como atrevida, al menos lo suficiente para afrontar su primera expedición a las Américas en 1527, capitaneada por el Gobernador Pánfilo de Narváez, integrada por 300 hombres, que tenía como finalidad la búsqueda de oro en territorio americano.

Dicha expedición llegó a la bahía de Tampa hacia abril de 1528. Fueron muriendo muchos de los integrantes de este grupo, convirtiéndose el jerezano en jefe de estos conquistadores. El grupo fue capturado en una de aquellas tropicales islas, logrando en 1535 y tras seis años de cautiverio, escapar junto a tres de sus compañeros: Alonso del Castillo Maldonado, Andrés Dorantes de Carranza y Estebánico, siendo éste último el primer hombre nacido en África en pisar el territorio “estadounidense”.

Por temor a los aborígenes de la costa, remontaron el río Grande o Bravo, en vez de dirigirse al asentamiento español de Pánuco. Durante el viaje hacia el noroeste de México, ejercieron de curanderos, extrayendo Cabeza de Vaca la punta de una flecha que un indígena tenía clavada cerca del corazón, ganándose así los favores y gentilezas del pueblo y tribus indígenas. Así pues, y con la intención de regresar a la Nueva España, realizaron varias expediciones en busca de alguna ruta posible, restableciendo el contacto con un equipo español de exploradores, a orillas del río Sinaloa en el año 1536, a pocas leguas de Culiacán, asentamiento español.

En su regreso a España, Cabeza de Vaca recogió aquellas vivencias en la narración Naufragios, que contiene los primeros apuntes etnográficos sobre las poblaciones indígenas del golfo de México. En 1537 pisa por fin suelo español, otorgándosele el título de Segundo Adelantado del Río de la Plata. Tras pasar tres años, a finales de 1540, vuelve a partir tomando rumbo, de nuevo, al continente americano. Llega a la isla de Santa Catalina, desde la cual inicia un viaje por tierra con el propósito de llegar a la villa y fuerte de Asunción del Paraguay, sede de la gobernación del Río de la Plata cruzando a través de selvas, ríos y montañas, siendo el descubridor de las cataratas del Iguazú y primer europeo en contemplarlas.

Alentados por Domingo Martínez de Irala, los capitanes y colonos españoles maltrataban a los indígenas en busca de quiméricos y mitológicos tesoros. Así, en 1544, tras estallar una sublevación, Cabeza de Vaca es acusado de abusos de poder al exigir el cumplimiento de las Leyes de Indias. El Consejo de Indias le desterró a Orán en 1545. Es incierto que llegara a cumplir esta condena, pues Cabeza de Vaca recurrió la sentencia y siguió peleando por su honor. Los últimos años de su vida son también una incógnita, al igual que su fallecimiento que se produjo hacia el año 1560, en Sevilla o Jerez de la Frontera.

Lo que sí podemos afirmar es que éste intrépido explorador siempre permanecerá en la memoria de su tierra natal, la cual le reserva para siempre un monumento eterno por su eterno valor, en una medieval y vegetal muralla rodeada de cipreses, en el legendario barrio de un legendario apóstol, en un marco de gitano porte y señorial estampa, en una Calle Ancha, descansa en paz Álvar Núñez Cabeza de Vaca.

Las 12 canciones de mi vida

Hoy voy a hacer algo especial. Quiero me conozcáis más, quiero que sepáis qué me gusta, cómo soy, de dónde vengo y a dónde voy. Y desde luego no hay mejor manero de contestar a todo esto que daros a conocer cuáles son las canciones de mi vida. Cada una me recuerda a un momento muy especial de mi existencia. Espero que os hagan sentir tan completo y feliz como me hacen a mí.

martes, 9 de noviembre de 2010

En una sola palabra, Lola

Siempre he sentido una especie de envidia sana de mi amigo Diego Yesa. Desde chicos jugamos juntos al baloncesto y, como suele pasar en estos casos, al crecer el individuo, crece la amistad y acaba asentándose con cimientos profundos y bien adheridos. Su actitud es abierta, amigable y amistosa; de sus gustos, los del buen jerezano; pero sin dudas lo que más me impresiona de él es que siempre, siempre y siempre está seguro de sí mismo. En su afán de buen anfitrión ya hace algunas fechas, nos invitó a unos pocos amigos a cenar en su casa. Su residencia se encuentra sobre el mítico bar “la Cruz Vieja”, muy cercano a San Miguel y justo enfrente de aquella conocida estatua de Víctor Ochoa que realizara en el 2003, justo enfrente de Lola Flores. Y quizás esa visión desde aquella terraza sea la que me incite a escribir estas líneas sobre “la Faraona”.

La popular bailaora, cantaora y actriz Lola Flores nació en el barrio flamenco y gitano de San Miguel, en Jerez de la Frontera en 1923. Antes de los doce años ya era reconocida en los ambientes artísticos jerezanos. En aquel entonces interpretaba canciones de Concha Piquer y de Estrellita Castro, aunque probablemente la canción que más se le recuerde de entonces es “el lerele”.

En 1939, con 16 años, debutó en el Teatro Villamarta de Jerez en el espectáculo Luces de España que encabezaba la pareja de baile formada por Rafael Ortega y Custodia Marchena y el guitarrista Melchor de Marchena. Lola Flores cantaba “Bautizá con manzanilla”.

Tuvo sus mayores éxitos como pareja artística de Manolo Caracol, con quien trabajó hasta 1951. En 1958 se casó con el guitarrista Antonio González "El Pescaílla", con el que tendría tres hijos: Lolita, Antonio y Rosario.

Actuó en el Madison Square Garden de Nueva York, y se recuerda una famosa crítica tras el estreno: «No sabe cantar, no sabe bailar, no se la pierdan». En 1962 recibió el Lazo de Dama de Isabel la Católica en 1967 fue premiada con la medalla de oro del Círculo de Bellas Artes Y en el verano de 1994 recibió la medalla al trabajo que tanto había deseado.

Aunque bien es cierto que Lola siempre negó que la sangre “calé” corriese por sus venas, es uno de los iconos más conocidos del mundillo gitano en nuestro país, sobretodo quizás porque ella misma se sentía identíficada con los valores, la música y la cultura de este pueblo.

Entre sus películas más conocidas se encuentran “María de la O”, “la hermana San Sulpicio”, “La Faraona” y “Sueños de Oro”, todas ellas rodadas en la década de los cincuenta. Los discos más conocidos de la brillante artista son "Ay Lola", "España mía", "Juerga flamenca", "Mi mundial 82" (1982) y "La inimitable Lola" (1990).

Murió el 16 de mayo de 1995 a los 72 años a causa de un cáncer de mama que le había sido diagnosticado en 1972. Su capilla ardiente quedó instalada en el Centro Cultural de la Villa, actual Teatro Fernán Gómez de Madrid. Fue uno de los entierros mas recordados por la cantidad de gente que acudió, el funeral fue retrasmitido en directo por televisión.

El arte que no tiene fronteras, que muchos creen poseerlo pero poca gente lo tiene, el arte que es místico, casto y puro, el arte que aunque antiguo todos siguen y adoran. El arte y la artista, gracias Lola.



jueves, 4 de noviembre de 2010

Érase una vez un Padre de Jerez

Y llegó Noviembre. Un mes triste en el calendario. El más triste. Un mes sin fiestas, sin celebraciones…, un mes de luto. Un mes en el añoramos a los que ya no están; a los que se fueron una vez, para no volver; a los que alcanzaron la gloria; a los que se marcharon siendo santos en la tierra para pasar a ser nuestros ángeles de la guarda en lo alto. Un mes de viejas fotos que reaparecen misteriosamente tras permanecer largo tiempo escondidas en baúles repletos de polvo; un mes de lagunas en rincones olvidados de nuestra memoria para vagamente recordar a los que en su día vivieron junto a nosotros y, por desgracia, sentimos como, sin nosotros quererlo, se iban siendo imposible que los acompañáramos.

Es por ello por lo que, queridos lectores, iniciamos una nueva temática de artículos, titulada “Personajes Ilustres”, con la que queremos recordar a aquellas excelentes personalidades de otros tiempos que, al igual que nosotros, se sentían orgullosos del Jerez pasado; todo ello desde la perspectiva histórica que nos caracteriza. Así pues, iniciemos nuestro memorial, recordando la prestigiosa figura del célebre escritor y periodista Padre Luis Coloma.

Luis Coloma Roldán nació en Jerez de la Frontera el 9 de Enero de 1851, en una familia de bien, encabezada por la figura paternal de don Ramón Coloma Garcés, afamado médico de nuestra ciudad, casado con doña Concepción Roldán, madre del escritor. Se decanta por los estudios Derecho. La crisis revolucionaria de 1868 le influyó decisivamente, convirtiéndose en acérrimo defensor de la causa Alfonsina en multitud de ámbitos: como redactor de un periódico madrileño, en sus artículos en la revista El Porvenir, de nuestra ciudad, en círculos y tertulias literarios y políticos; todo ello clave para su afamada novela Pequeñeces, que censura de forma agria y virulenta la aristocracia durante la época de la Restauración Alfonsina, donde intrigas y sociedades secretas constituyen el fondo de la novela.

En este contexto tiene lugar un incidente que cambiará radicalmente su vida, una herida de bala en el pecho que le produjo el disparo de un revólver mientras lo limpiaba. Coloma vio la muerte de cerca, y en sus reflexiones decidió que debía ingresar en la Compañía de Jesús. Así pues, el 5 de octubre de 1874 marcha a Châteaux de Poyanne, estudiando el noviciado hasta 1877, ejerciendo la docencia hasta 1885 en distintos centros jesuitas, hasta que el 2 de febrero del año 1886 se produce su inclusión definitiva a la orden; contándose hasta la fecha en su haber literario producciones como Solaces de un estudiante, redactado bajo la tutela de Fernán Caballero; Lecturas Recreativas, que incluye cuadros de costumbres, cuentos infantiles y de tipo político – sociales y relatos breves, entre los que caben citar Ajajú o La Gorriona, perfilándose como excelente narrador de cuentos, como el inolvidable Ratón Pérez.

Al finalizar la década de los años noventa publica Retratos de antaño (1895) empresa que Coloma llevaba en mente desde hacía dos décadas, tal como confiesa a su amigo el duque de Luna en la dedicatoria que figura al frente de la obra. En el año 1898 publica La reina mártir y en 1903, el Marqués de Mora, semblanza de este personaje. Corpus de relatos históricos que se completa con Jeromín, la más popular después de Pequeñeces. En los albores del siglo XX publica también obras de relativa importancia, aunque silenciadas por la crítica, como la Historia de la sagrada reliquia de San Francisco de Borja (1903), ensayos críticos como con motivo de su ingreso en la Real Academia Española en el año 1908.

El día 10 de junio de 1915 el Luis Coloma Roldán falleció en Madrid a los sesenta y cuatro años de edad. Cuentos como Periquillo sin miedo, Ratón Pérez o La Gorriona conforman la esencia y alma de su legado literario, imprescindible no sólo para la historia del cuento español, sino para la historia y el pueblo de Jerez, pueblo que siempre lo recordará como el querido Padre Coloma. Y colorín colorado, este artículo se ha acabado.

martes, 2 de noviembre de 2010

Un paréntesis para reflexionar

Aunque sé que no es ni el fin, ni la utilidad de nuestro blog centrarse en los problemas globales-sociales que ocurren en este "loco Mundo loco" en el que vivimos, hace poco mi hermana me enseñó este vídeo que es un grandísimo ejemplo del claro respeto y cariño que existe entre los diferentes países en los que se divide el globo terráqueo, o no.
Les pondré en situación, Jonathan Lambert es un prestigioso humorista francés que aprovechando esta norma revolucionaria de expulsión de rumanos sin papeles en Francia, se le ocurrió realizar un "sketch" en el que enseñaba a los telespectadores a hacer el saludo rumano.
Tras grandes revueltas en Rumanía, con llamada incluída del primer ministro del país Traian Basescu al "mandamás" francés Sarkozy, a los señores de la tele del país de Europa del Este no se les ocurre otra cosa que responder con el mal-llamado saludo francés.
La buena educación con buenos modales, lo que se debe hacer y lo que no, la guerra y la paz o las gallinas que entran por las que salen.